sábado, 17 de abril de 2010

Los valores del arte - por Lucas Molina

















                   




Admiramos a Picasso y a Goya, a Miguel Angel, a Rodin, a Van Gogh y a tantos grandes maestros del arte. Clásicos o modernos, manieristas, impresionistas, cubistas y surrealistas.
Valoramos la creatividad de estos artistas, su maestría técnica, su capacidad de representar un acontecimiento histórico y  la gran expresividad de sus figuras así como su sentido de la armonía y la belleza en cada una de sus obras.
Todas las enciclopedias nos muestran la vida y obra de estos artistas; miles de museos en el mundo están dedicados a ellos que son los artistas más destacados de la cultura occidental.                    

Sin embargo, en las Bienales de Arte y concursos de pintura, paradójicamente se premian obras que nada tienen que ver con los principios técnicos, estéticos y artísticos de estos grandes maestros: No es más que una burla para los amantes del arte. Quizás porque se ve en ellas algo de "original", cuando en realidad no es algo más que un objeto extravagante.No les parece absurdo todo esto? Quizás más absurdo que la obra premiada!




Obras vacías de contenido y desprovistas de técnica (por no decir de virtuosismo) ganan premios y son publicadas en las revistas especializadas. Sus creadores, artistas mediocres y sin escrúpulos realizan una serie infinita de muestras en las galerías más importantes del mundo.

Creo que todo esto sirve sólo para crear “arte de la nada” y usarlo para lavar dinero o para alimentar la especulación de galeristas y coleccionistas privados.
De este  modo cualquier “artista” con un poco de suerte y sin ningún talento creativo,  puede alcanzar renombre y vender sus obras a precios astronómicos, dándole así un  valor de mercado a un objeto que en realidad no lo tiene. De esta manera un pedazo de madera o una tela pintada puede valer mucho más que una Ferrari.

Donde está el espíritu del arte, su relación con la naturaleza, su sentido de la armonía y de belleza?
El arte actual es solo la cáscara de ciertos principios surrealistas ya superados,  es la manifestación más evidente del vacío cultural en el que hemos caído. Un postmodernismo decadente y absurdo, por definirlo de alguna manera.

Estamos cansados de ver “obras” que pasan por geniales cuando en realidad son solo porquerías: un mamarracho infame, un producto más del mercado para burgueses aburridos y traficantes de cultura. Una burla macabra para los amantes del arte.
Creo que es mucho mas Arte, el de los graffitis y el de los pintores callejeros.







Lucas Molina
Por favor dejà tu comentario.
Gracias
.


1er premio ArteBa 2010 




.




1 comentario:

Aqui puedes dar tu opinion

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.